Articulo interesante

QUÉ PREVISIBLE ES EL CICLISMO!
Vemos que los organizadores de la Vuelta al País Vasco se rompen la cabeza para poder establecer recorridos que den interés a la carrera.

En la primera etapa introducen dos subidas infernales a la Reineta y …. GANA UN ESPRINTER! Sólo salta la sorpresa con la pérdida de 1’39” de Samuel Sánchez por el brote alérgico que está asolando a los deportistas de Euskadi en estos días tras la intensa lluvia sufrida y el sol esplendoroso que ahora nos acompaña.

Segunda y tercera etapa se vuelven a disputar al esprint! Inaudito en etapas que ascienden más de 3.000 metros acumulados.

Cuarta etapa: se va a ritmo vertiginoso y se mueven en los últimos 5 km de la última subida a Arrate. Se hacen microdiferencias de segundos. Todos los ciclistas dicen que se ha ido muy rápido, pero lo cierto es que Amets Txurruka llega a la misma velocidad que los capos casi hasta la cima habiendo hecho el solito casi la totalidad de
kilómetros. Desde cuándo la fuerza de un grupo de escapados, e incluso la de un solo hombre es comparable a la de un pelotón en el que hasta cuatro equipos ponen a tres corredores cada uno para realizar la caza?

Quinta etapa: descomunal subida a Aia en dos ocasiones y … apunto ha estado de ganar de nuevo un hombre en fuga, el mismo que ha estado en fuga toda la vuelta: nuestro sueño Amets.
Está pasando algo que hace al ciclismo muy previsible. Tu diseñas etapas con muchas microsubidas y llegan todos juntos y se dilucida al esprint. Si la etapa tiene una distancia cercana a los 200 km, se produce una escapada consentida, que se atrapa y se dilucida al esprint. Si la etapa también de 180 km termina en una cuesta, se deja una escapada y se juegan los puestos en los últimos 5 km obteniendo rentas de segundos.

INNOVAR: Ha habido jornadas de doble sector dónde se corrían 110 km por la mañana y una crono por la tarde. Resultaban trepidantes. Por supuesto me acuerdo de la ganada por Agustín Sagasti. Estaba él en cabeza, dos italianos intentando darle caza, otros fugados, el pelotón… Era un ciclismo imprevisible, había vida.

RAZONAMIENTO FISIOLOGICO: Los ciclistas tienen una preparación física donde la clave está en llegar a tener un enorme depósito de glucógeno en su organismo que junto con su metabolismo graso les proporcionará la resistencia para hacer etapas de 200 km a alta velocidad durante 20 días seguidos. Con esta preparación los cambios de ritmo se pagarán estrepitosamente. Abocarán al organismo al vacío. El ciclista lo sabe y lo teme. Esta alta velocidad mantenida a la que se realizan etapas de 200 km atenaza y
amordaza las opciones de los ciclistas. Nadie puede salir de un pelotón que va rodar a 43 km/h de media al final de los 200 km sin tener que hacerlo por su cuenta a 45 km/h. Simplemente no es humanamente factible. La paradoja de todo esto que todo se hace a
un mismo gasto metabólico, tanto en subida como en llano. Este elevado ritmo mantenido facilita que esprinters de reconocida clase sean capaces de tolerar todas las subidas de 4 a 9 km de distancia sin perder contacto con el pelotón y después disputar el esprint como si de una etapa llana se tratara.

DESBLOQUEO DEL ACTUAL CICLISMO: Queremos televisión y queremos espectáculo. Pues bien si se contrata a estos ciclistas capaces de estas elevadas velocidades en largas etapas y se les proponen etapas de 110 km con dos puertos de primera de 6 a 9 km y 2.000 metros de ascensión acumulada dará para todo:

1- Existe la opción de televisarla entera
2- Veríamos los 50 primeros kilómetros de cada etapa que son los más trepidantes y es dónde se hacen las escapadas
3- Veríamos un ciclismo arriesgado y valiente, ya que sus depósitos son muy superiores a la propuesta del organizador y no hay miedo a no terminar. Eso permitiría acciones valientes desde lejos. Ellos son capaces de mucho más y lo demostrarán dando espectáculos inimaginables
4- Veríamos unos finales de etapa dignos de gladiadores. Con dos puertos de primera subidos a ritmo de ácido láctico no hay opción a que ningún esprinter se cuele en una etapa reina y menos a que se de una llegada masiva.
5- Se darían imágenes espectaculares de ver a grupos de ciclistas que se persiguen y no se alcanzan debido a que sus fuerzas son parejas y a que no tienen temor a que se les acabe el combustible. Sería una lucha dónde tienen cabida los capos y los modestos del pelotón. Todos.
6- Se podrían diseñar hasta dos etapas en un día si así lo requiere la organización. Dos horas y media por la mañana y dos horas y media por la tarde. Tienen capacidad de sobra para ello.
En fin, se ha llegado a un bloqueo que hace muy tedioso el ciclismo y sin embargo no lo es así en las categorías amateurs. Todos vienen de unas categorías inferiores donde el ataque es la salsa del deporte y todos suben a profesionales donde todo está atado y bien atado.
Hay opciones de cambiar la situación por medio del cambio de kilometraje con unos metros de ascensión adecuados. No puede ser que un país como el vasco se esté dilucidando el liderato por el puestómetro. Nuestro terreno es digno para la guerra de guerrillas y eso es espectáculo. Hay que recuperar el espíritu de los amateurs donde no había miedo a dejarse la vida en cada etapa. Eso es heroico. Eso necesita el ciclismo. El arrojo, la valentía, lo imprevisible.

Fuente: Senkirol