La buena compañía no tiene precio

Una brisa fresca de verano, cuatro cicloinomanos y una carretera vertical como la fachada de Notre danme de Paris, dibujaban un panorama de lo más divertido. Llegados a pie de costas giro a la derecha y camino del purgatorio, Javi quiere probarse, conecta su crono y despega de la tierra como un ángel que se despide de la gente para apoderarse de las cotas más altas del paraíso ciclista, él sabe de la dureza de su cometido, pero es la determinación y la seguridad en sí mismo la que no deja que el dolor o la fatiga se apoderen de él, sabe que es fuerte y la montaña aunque se siente grandiosa, este combate hoy lo gana el Javi, 15:50 El tiempo no es relativo como dijo Einstein, el tiempo del Javi es superlativo que es muy diferente.

Detrás de tanta proeza quedábamos nosotros, un trio de amigos del dolor con ganas de combate, se arranca el puerto con ritmo alegre, el Gabi regula de un principio y yo me engancho con el guillen en otra de nuestras infernales batallas, lo malo es que esta tenía solo un guerrero y ese era el guillen, pone un ritmo duro y tierra de por medio, yo quedo solo ante los desniveles imposibles de este Rat Penat, el Gabi por detrás apretando de lo lindo, me parece que este chico es muy bueno y no lo sabe, solo que hubiese estado con nosotros unos pocos metros más al principio, seguro que le hubiesen bastado para darme mi merecido pero bueno la confianza llegara y ya no me perdonara tanto este campeón.

Llegamos a la pleta con algún espejismo que otro y cuando coronamos la bola del mundo rellenamos los depósitos con combustible, unas risas y a por las costas.

Que decir de las costas, una descarnada batalla con un Javi inmenso, hace que posiblemente sea el día, que más rápido he cruzado este desgastado macizo costero, el corazón parecía ocupar toda mi caja torácica y mis pulmones desprendían oxigeno suficiente para hacer volar un zepelín, como me gusta ir deprisa, que pasada. Como no podía ser de otra manera al final sprint especial con victoria de Javi.

Begues, siempre Begues, que decir de este puertito que no sepáis, 6 kilometritos que siempre hacen pupa y yo al límite del mal como decía la canción de la Unión. Gabi gracias a su resistencia se marcha con el Javi, yo ya no puedo ni moverme y me quedo vencido, a lo lejos veo como el guillen para sus caballos y decide quedarse con migo, el está fuertísimo y hoy es un gran día para él, pero decide quedarse  y ayudarme, él sabe lo difícil que es sentirse solo y sin fuerzas y se queda con migo. Son estos detalles los que te hacen tan grande Guillen.

Y la semana que viene???. Te esperamos Alfonso, no faltes.

Alguna imágenes curiosas.

 

Adeuuuuuuuu…………..